María Belén Opazo es de Cinco Saltos y, cinco años atrás, decidió emigrar a Añelo junto a su pareja en busca de una mejor situación laboral. Este año, cuando se desató la pandemia, se enteró que estaba embarazada de doce semanas.
“No sabía como podía llevar las cosas. Pero, desde el principio, me fueron guiando para que no me deje de controlar y lo importante que es realizar los controles prenatales a tiempo. Enseguida pude acceder al turno por parte de la Fundación Baylor Argentina. Enseguida ellos me explicaron el uso de la telemedicina para poder estar en contacto con los profesionales y seguir los lineamientos y protocolos sanitarios. Así pude combinar las atenciones presenciales como la telemedicina en el caso que no era necesario la presencia física”, cuenta María Belén. Y agrega: “Es una ventaja enorme porque son cosas a las que nos vamos adaptando y nos ayudaron muchísimo. Por allí nos mandamos con la doctora recetarios, pedidos de análisis, los resultados y la verdad que fue de mucha ayuda”.
A muy pocos días de dar a luz, destaca lo “importante” que fue el acompañamiento para una madre primeriza en contexto de pandemia. “Ser primeriza genera miedos y, en esta etapa, peor. Ahora, cuando nos encontramos vía Zoom con otras mujeres embarazadas de la ciudad, nos damos cuenta que todas pasamos por lo mismo. Los temores los tuvimos todas”, agrega.
“La atención médica es importante pero la atención humana también. Desde la Fundación me aconsejan mucho, yo estoy muy conforme. De hecho, le dí los datos a otras chicas de la zona de la Meseta que se enteraron que están embarazadas para que puedan tener sus controles en tiempo y forma y evitar riesgos. Pero no sólo la atención de la Fundación sino también del hospital es la que destacó. Siempre pendientes de cómo estaba, de cómo me sentía. Es gente con vocación, con empeño. Es un grupo muy lindo. Ojalá puedan seguir trabajando en Añelo”, agregó María Belén, quien realizó una publicación en la red social Facebook para destacar el apoyo y el acompañamiento que recibió de la Fundación Baylor Argentina.
En tiempos de pandemia, la telemedicina se transformó en una herramienta vital para que los pacientes y los profesionales mantengan un contacto estrecho y necesario, evitando la presencia física en aquellos casos que no era necesario. Además, le brinda a los pacientes la contención y el acompañamiento ante las dudas y consultas que puedan tener.